¿Hay piojos en invierno? ¿Puedo contagiarme?
Efectivamente, la probabilidad de que aparezcan piojos en invierno es un rotundo ¡sí! De hecho, pueden sobrevivir e incluso aumentar durante los meses más fríos.
El frío no impide la aparición de piojos
¿Por qué no mueren los piojos en invierno?. Es esencial recordar que, a diferencia de los humanos, que nos abrigamos y encendemos la calefacción para combatir el frío, los piojos no necesitan esos esfuerzos para mantener su entorno agradablemente caliente. ¿Por qué? Porque su hábitat es el cuero cabelludo humano, que permanece calentito independientemente del tiempo que haga.
Por tanto, pueden vivir en condiciones adecuadas incluso en invierno. Mientras tengan una nuca tras la que esconderse, los piojos pueden estar cómodos aunque su huésped humano tenga frío.
Pero eso no es todo. Además de los factores ambientales, nuestros hábitos invernales también contribuyen a la propagación de los piojos. Mientras que el verano trae consigo los campamentos y el intercambio de gorros y toallas, en invierno la proximidad que mantenemos y el intercambio de prendas de abrigo favorecen su proliferación.
¿Cómo proliferan los piojos durante los meses de invierno?
En primer lugar, el curso escolar está en pleno apogeo durante la estación invernal. Los niños pasan muchas horas juntos en espacios reducidos durante las clases. Además, el frío y la lluvia tienden a empujarles a jugar dentro de casa, lo que significa un contacto más estrecho, juegos de mesa, videojuegos y grupos de cabezas muy próximas, a menudo utilizando sofás, almohadas y otros objetos que luego se convierten en refugios temporales para los parásitos.
Esto se ve agravado por la facilidad con que se comparten sombreros, bufandas y otras prendas de abrigo durante esta época. Cuando bajan las temperaturas, vamos más abrigados que nunca, lo que da a estos parásitos amplias oportunidades de pasar de una persona a otra.
¿Cómo prevenir los piojos en invierno?
Aunque los piojos tienen preferencia por los climas más cálidos, consiguen resistir y propagarse en el ambiente invernal.
Para aplicar algunas medidas preventivas contra los piojos durante los meses más fríos, asegúrate de que tus hijos sepan que no deben compartir gorros ni bufandas con sus compañeros, sobre todo en el colegio o durante las actividades extraescolares.
